
LA ESQUINA DE "EL FOCA"
Con un chirriar estridente y ambulante
desde el gris bulín se desplazaba;
una figura torva y bamboleante
y de espesos mostachos, lo empujaba.
Al cine Jockey en ritual camino
acudía en ronda y mantinée,
hasta la función nocturna, su destino:
de “Volpi”, “Alpino” y “Renomé”.
Su bocaza desdentada protestaba,
-un pibe le robaba chupetines-
y, con furia, su palo revoleaba
en la esquina añorada de aquel cine.
Quién no intentó quedarse, de rebote,
una dulce golosina, por izquierda?,
y quién, su guardapolvo y sus bigotes,
emblema de ese cine, no recuerda?
Hoy al pasar y ver los viejos muros,
su abandono un lagrimón provoca;
y parece escucharse, otra vez, “turos”;
el reclamo ancestral del viejo Foca.